Ma Khin Café es un espacio abierto a todo el mundo. No podía ser de otra manera. Ma Khin nació a finales del siglo 19 en una familia mixta, hija de un comerciante chino y una mujer mon, (los mon forman uno de los más de cien grupos étnicos que componen la actual Myanmar). A la muerte de su padre tuvo que ponerse a trabajar liando y vendiendo puros birmanos o cheroots en el bazar de su ciudad, Moulmein. Allí es donde empezó la relación de amor con uno de sus clientes, Sir William Carr, un joven procedente del norte de Inglaterra, recién llegado al país como juez en la administración británica de lo que por entonces era British India (Birmania tenía el estatus de provincia).
La pareja pasaría más de medio siglo junta y su historia sobrevivió guerras, revoluciones y el final del Imperio Británico. No fue la suya una relación fácil. Los matrimonios mixtos eran vistos con hostilidad tanto por los gobernantes británicos, recelosos de cualquier intimidad con los nativos, como por los propios birmanos, que estaban convencidos de que relacionarse con los colonialistas solo traería abandono y desgracia.
Me resulta chocante que con el paso de los siglos no hayamos logrado superar esos prejuicios, ese miedo al Otro. Aunque somos diferentes por naturaleza, a menudo nuestras diferencias se perciben como una amenaza, en lugar de verlas como un valor fundamental de nuestras sociedades, una fuente de riqueza que contribuye a nuestra evolución.
La evolución de la gastronomía y la filosofía Decolonial de Ma Khin Café
La gastronomía ha evolucionado extraordinariamente en España en las tres décadas que llevo en el país. Mi primer restaurante, Seu Xerea, fue uno de los primeros en ofrecer cocina de fusión. Es posible que aquella propuesta, novedosa en los años 90, no despuntaría tanto en el actual panorama gastronómico de Valencia. La diversidad gastronómica se ha normalizado en un país que muestra hoy horizontes más abiertos.
Y esa es la senda que Ma Khin Café quiere continuar con su filosofía de Decolonial Food. Nuestro equipo, clientes y proveedores son diversos por naturaleza, representativos, ellos mismos, de la diversidad de nuestra sociedad. No queremos que esas diferencias queden ocultas, sino reconocerlas y valorarlas, porque nunca renunciaremos a nuestro compromiso de acoger con idéntica generosidad a las personas y a sus gastronomías.
«Nunca renunciaremos a nuestro compromiso de acoger con idéntica generosidad a las personas y sus gastronomías»